De siempre, los vinos consistentes y completos como este Giné Giné 2013, expresión absoluta de la esencia de la Licorella del terroir del Priorat van asociados a platos consistentes, y en este caso, con ganas de investigar en paladar, decidi apostar por unos berberechos al vapor con un toque de limón. Ante todo voy a contaros algo de vino. Elaborado con un coupage de garnacha negra y cariñena, Estamos ante un vino con una alta graduación alcoholica, tiene 15 º, pero en boca no se nota la esencia del alcohol que puede dar a entender que desprende al tener tan alta cifra. Es un vino elegante, noble, que pese a el trazo seco en boca que aporta, estalla en matices profundos de frutos rojos y regaliz en boca. Cautiva, y representa el corte moderno del buen vino que existe en la DOQ Priorat a un precio muy acertado, aproximadamente unos 11 euros. Un vino bien posicionado y que es un buen embajador de su terroir. Y ahora os explicaré como resulto el experimento de los berberechos al vapor al toque de limon y este interesante vino. Sencillamente, es un puzzle de matices que se complementa, el berberecho hidrata y da toque ácido en boca, que encaja con la sutilidad y clase del vino, encaja perfectamente. Un descubrimiento de complemento ideal. Puzzle en paladar y redondeo de esencias. Por que con el buen comer y beber, también se puede experimentar.... y acertar! Salud!
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